jueves, 30 de enero de 2014

Roscoe Arbuckle, Fatty

La enorme figura de Roscoe Fatty Arbuckle iluminó el cielo de Hollywood hasta el momento de su ocaso.
Fatty no solo fue una influencia directa en los mayores exponentes del slapstick estadounidense, sino que sus obras hablan cien años más tarde.
Galán y contrapunto, héroe y cobarde, en todos sus papeles se destacó por un uso nada burdo de su sobrepeso, un juego físico en donde nunca se remarca su gordura y sí se crea un halo de belleza que para nada tenía.
En el debut de Pollo al spiedo queremos compartir Fatty joins the force, cortometraje mezcla de amargura con slapstick, en donde nuestro querido Roscoe, obviamente, se hace policía.

La película de 1913 es de las menos interesantes de Arbuckle, no solo por el guión para nada elaborado, sino por el desfasaje entre los esperable de las caídas, golpes, gestos y todo el trabajo físico de los actores con el sorprendente final, agrio y nada gratificante para los amantes del cine de Fatty.
Después de leer esto te preguntarás, ¿me están ofreciendo una mala película en el debut de un blog de cine "recomendado"? No, no es mala. Es muy buena, pero Fatty es uno de los autores y actores más relevantes de la historia del humor en el cine mundial; esto es mediocre en estándares Arbuckle...

3 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  2. Che Germán que estupendo, empiezas con cine mudo del bueno, espero colaborar en el sitio, salud y fuerza amigos ¡¡

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  3. Felicitaciones por el inicio del blog... y con el gran Fatty, una figura trágica...

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